Con la mira puesta en la importancia de la tecnología como factor de cambio para que las mujeres diseñen un futuro más disruptivo, se desarrolla del 5 a 17 de marzo la edición 67 de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW, por su sigla en inglés) que organiza la ONU en Nueva York.

Hablar de estos temas en plataformas internacionales, donde se deciden los modelos a seguir en las organizaciones y gobiernos, pone de manifiesto la tendencia a dotar de herramientas a las mujeres para fortalecer su talento y liderazgo, de modo que pueda plantear innovadoras formas de conectar.

Durante estos días se destacará que la innovación, el cambio tecnológico y la educación en la era digital pueden impulsar una igualdad de género, así como el empoderamiento de las mujeres y las niñas. Cada vez existen más mujeres incursionando en empresas tecnológicas, para ir un paso adelante respecto a los modelos de negocio tradicionales. Rompen paradigmas entrando a negocios de última generación; hay mayor acceso a financiamientos; pero aún existe una brecha significativa en la toma de decisiones.

El Día internacional de la Mujer (8M) conmemora la lucha por nuestros derechos para reivindicar la igualdad de género en todos los ámbitos, incluido el empresarial.

Según el Informe Mujer Emprendedora 2019, de la ONU, en ese año creció 10 por ciento el número de empresarias, es decir que se sumaron unas 250 millones de mujeres a escala global para contribuir al crecimiento económico.

En México 41 de cada 100 emprendimientos son fundados por mujeres. El país es el segundo más importante de América en brindar esta ventana de oportunidad.

Sin embargo, para 2020 se presentó la pandemia por lo que se perdieron muchos de estos negocios y startups.

En la edición de ONU Mujeres 2021-2022 se destacó que 44 países, con mil 600 millones de mujeres y niñas, adoptaron políticas para promover en ellas el empoderamiento económico y 4 mil 357 empresas firmaron los principios del empoderamiento femenino.

El sistema económico es complejo, cambiante y en constante evolución, cada vez más ligado a la tecnología, lo que otorga nuevas competencias a las mujeres.

El covid-19 se erigió como la principal derrota de las mujeres en el ecosistema emprendedor, por el alto nivel de cierre de empresas, y también evidenció las desigualdades existentes aún, profundizando las brechas multidimensionales.

Pero la incertidumbre por la pandemia obligó a las mujeres a adaptarse a nuevas formas de pensamiento y abrió ventanas de oportunidad a la economía digital.

También produjo desafíos para que las mujeres aún no terminen de afianzar las condiciones de su incorporación a los mecanismos de generación de riqueza. Según el IMCO, de quienes egresan de las carreras de STEM, solo 12 por cieno son empleadoras, es decir, en la tecnología solo hay una empresaria por cada siete hombres.

Existen muchos avances, niveles de madurez e incidencia entre compañeras, pero las emprendedoras ya significan una fuerza productiva importante.

La tecnología sí tiene género. Trabajemos en que su rostro, al menos en México, no sea de desigualdad y falta de acceso, sino que magnifique las posibilidades de que las mujeres podamos definir un nuevo futuro. 

Sonia Garza es presidenta de la Asociación Mexicana de Mujeres jefas de Empresa

Milenio, Ciudad de México / 08.03.2023 00:07:00