Mi tema principal es la vida de los pobres. Si soñáis con ser periodistas no podéis ignorarlos. Los pobres constituyen el 80% de la población de este planeta. La pobreza no tiene voz. Mi obligación es lograr que la voz de estas personas sea escuchada.”
Ryszard Kapuscinski
Cuando sereno como era declara que “Los cínicos no sirven para este oficio”
(Sobre el buen periodismo) nos está contribuyendo con una declaración que le ha trascendido y que no se puede ocultar por más que algunos que se ostentan como admiradores hoy por hoy estén, descalificados desde ayer ,ayer, porque tomo sus palabras y argumento “Es un error escribir sobre alguien con quien no se ha compartido al menos un tramo de la vida.» Es uno de los temas centrales de Los cínicos no sirven para este oficio, un libro «conversado» sobre el trabajo del periodista, sobre sus dificultades y sus reglas, sobre la responsabilidad de los intelectuales que, hoy en día, se dedican a la información. ¿Cómo contar la pobreza, el hambre, las guerras? ¿Es imprescindible tener motivaciones éticas para ser un buen periodista? ¿Qué relación existe entre realidad y narración? ¿Cómo moverse entre la investigación de la verdad y los condicionamientos del poder? El libro incluye una entrevista de A. Semplici con el escritor acerca de los acontecimientos que llevaron a la emancipación de África del dominio colonial, y un diálogo con el narrador y crítico de arte John Berger sobre el «ver, entender y explicar».
«Un espléndido compendio de todos aquellos criterios que Ryszard Kapuscinski ha aplicado a lo largo de su carrera. Es un canto a la ética periodística y una referencia para ejercer el oficio de contar con una mínima dignidad» (ABC).
BIOGRAFIA
El periodista, historiador, escritor de novelas, ensayos y poesías Ryszard Kapuscinski, nació el 4 de marzo de 1932 en Pinsk (Bielorrusia, Polonia). Considerado el periodista más importante del siglo XX debido a su trayectoria de cincuenta años, su compromiso con el bien común, su identificación plena con la época en la que vivió y además, por reivindicar aquellos continentes y países que fueron olvidados por el primer mundo, acciones que le valieron numerosos honores y premios, como el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades en el año 2003, y doctorados Honoris Causa por numerosas universidades. Fue también miembro de la Academia Europea de las Ciencias y las Artes[1].
En el año 1953, ingresó en el Partido Comunista de su país y obtuvo su tituló en Historia en la Universidad de Varsovia tres años después. Durante un largo tiempo trabajó como corresponsal, en total, visitó 100 países de Europa, África y América Latina, siendo testigo de fenómenos sociales que después describió en sus 21 libros publicados y en los artículos que acogieron medios de renombre como el New York Times, la revista Time y el Frankfurter Allgemeine Zeitung. Para la década de los ochenta Kapuściński se dedicó́ a viajar, algo que continuó haciendo hasta el final de sus días, aunque no como corresponsal, sino como invitado a conferencias, universidades, presentaciones de libros y otros actos, dentro de ello encontramos que fue maestro de la Fundación Nuevo Periodismo Iberoamericano, creada y presidida por el escritor Gabriel García Márquez[2].
Es importante recordar a Ryszard Kapuscinski como uno de los más brillantes del periodismo europeo habiendo cubierto procesos de independencia y revoluciones en África, América Latina y Asia. La obra de Kapuscinski se caracteriza por la acertada combinación entre una exhaustiva documentación previa, las propias vivencias en la zona, el conocimiento profundo de sus habitantes y una extraordinaria capacidad de análisis de los acontecimientos histórico-políticos, todo ello relatado con gran estilo literario[3]. Ryszard Kapuściński fue y continúa siendo una figura clave para analizar y comprender los principales procesos que se llevaron a cabo durante el siglo XX a través de un nuevo modelo de periodismo literario, único en su categoría, a la vez que proyecta un recuento muy íntimo de las experiencias del autor en el campo. Uno de los rasgos más singulares de la vida y el pensamiento del reportero es su metodología de trabajo de campo, su enfoque humanista y el énfasis que hace sobre la importancia del entendimiento para con el Otro[4].
En los últimos años de su carrera, muchas de las historias que el polaco capturó en textos fueron Un día más con vida, Viajes con Heródoto y El imperio, siendo puestos en duda por especialistas que detallan ciertas imprecisiones en el reportaje e incluso apuntaban que el autor había inventado fuentes y hechos que beneficiaban su escritura. Kapuściński siempre se defendió. Él no era un reportero, era un periodista narrativo[5].
Al ser Kapuscinski ponente en una de aquellas ocasiones que se encontraba dando un curso de periodismo, le preguntaron: ¿De qué lado anda un periodista que cubre una guerra desde la trinchera?, ¿Puede cambiar la realidad de la que escribe? a lo que Kapuscinski respondió: “Mi tema principal es la vida de los pobres. Si soñáis con ser periodistas no podéis ignorarlos. Los pobres constituyen el 80% de la población de este planeta. La pobreza no tiene voz. Mi obligación es lograr que la voz de estas personas sea escuchada” [6].
El reportero polaco, idealista y amigo de las causas perdidas falleció en Varsovia el 23 de enero de 2007 (¡)
Dejó muchos libros, mucha memoria que disfrute cuando viaje por su excepcional Varsovia, cuando entendí porque nos entendía, viendo su Polonia fragmentada, desde las ruinas de Varsovia acabada hasta los cimientos mientras de Cracovia luce su opulencia aun hoy día, porque de ahí justamente saldría el Papa que cerraría la pinza con Lech Walesa para cerrar la hegemonía bipolar de la URSS que hoy renace para la multipolaridad, Kapuscinski erano solo un hombre que en su momento por esos andares de la vida conocí, admire y cuya memoria merece respeto porque tenía razón LOS CINICOS NOSIRVEN PARA ESTE OFICIO aunque he de agregar que de cierto advertimos que algunos aún puedan lucrar con él.
COROLARIO
Ya solo para demostrar que en todo hay perspectivas, aquí comparto el breve poema de la también escritora polaca Wislawa Szymborska, ganadora del Nobel de Literatura en el año 1996 titulado;
PERSPECTIVA
Se cruzaron como dos desconocidos,
sin gestos ni palabras,
ella de camino a la tienda
él de camino hacia el carro.
Quizá entre la consternación,
o el desconcierto,
o la inadvertencia,
de que por un breve instante
se amaron para siempre.
No hay sin embargo garantía
de que fueran ellos.
Quizá de lejos sí,
pero de cerca en absoluto.
Los vi desde la ventana,
y quien mira desde arriba
se equivoca con mayor facilidad.
Ella desapareció tras una puerta de cristal,
él subió al carro
y arrancó rápidamente.
Así que no pasó nada
ni siquiera si pasó.
Y yo solo por un momento
segura de lo que vi,
intento ahora en un poema casual
convencerlos a ustedes, Lectores,
de que aquello fue triste
(¡) CNDH MEXICO
[1] http://www.lecturalia.com/autor/488/ryszard-kapuscinski
[2] https://trabalibros.com/autores/ryszard-kapuscinski-biografia
[3] https://trabalibros.com/autores/ryszard-kapuscinski-biografia
[4] http://www.revistalatinacs.org/067/cuadernos/CAL37Sarah.pdf
[5] https://gatopardo.com/perfil/ryszard-kapuscinski/